jueves, octubre 18, 2007


Jueves 18 de octubre de 2007

Carta a la Junta Directiva de la SEIMC


Enviada por el Dr. German Seseña del Olmo

Estimada Junta Directiva de la SEIMC;

Como socio de la Sociedad, me pongo en contacto con ustedes para hacerles llegar mi malestar ante los acontecimientos que se han producido en las últimas semanas en cuanto al tema de la inexistencia de plazas para microbiólogos en los nuevos hospitales de Madrid.

Es redundante decir que estas plazas hubieran sido providenciales para aliviar en parte, la crítica situación de los microbiólogos en paro. No hay más que ojear el revelador estudio que la GEFOR ha publicado en su página recientemente para ver de una manera objetiva lo que se venía viviendo desde hacía tiempo. No obstante y contra toda lógica las plazas para nuevos residentes de Microbiología no han sufrido modificación alguna, lo que hace aumentar la ya obesa lista de microbiólogos en el INEM y la lista anexa de microbiólogos que se ven obligados a repetir especialidad.

Por otro lado, hemos asistido atónitos a las condiciones que ha ofertado en sus entrevistas el hospital de Valdemoro para los microbiólogos, a saber:

- Jornada intensiva de mañana y tarde de lunes a viernes, con un horario no muy bien definido…

- Labor asistencial los sábados alternos por la mañana.

- Una de cada tres semanas, guardia localizada durante las 24 horas del día, los siete días de la semana.

- Contrato por obra; para traducir este término laboral se puede consultar con cualquier experto en la materia, que probablemente le dirá algo así: viene a ser un contrato que se acaba cuando la persona que te ha contratado quiera que se acabe, más o menos.

- VALIDACIÓN DE LOS RESULTADOS DE BIOQUÍMICA cuando el analista no esté presente. (Las demás condiciones podrían definir un contrato abusivo, siendo comedidos, pero este punto creo que define, si nadie lo corrige, la ilegalidad.)

- El sueldo, MIL SEISCIENTOS EUROS (1.600 euros) (no 1.500 como se indicaba en un documento publicado en la página de la SEIMC… por 100 euros más o menos, manejando las cantidades que se manejan, no vamos a entrar en polémica.

En estas condiciones la labor científica y divulgativa, propia de nuestra profesión, se plantea complicada. Además la asistencia a cursos de formación se antoja muy difícil ya que el laboratorio en cuestión pensaba funcionar, esperemos que haya cambiado su política, con un director de laboratorio, un analista clínico y un microbiólogo. Es probable que ninguno de los facultativos entrevistados, viendo el yermo panorama, preguntara en la entrevista por el derecho de enfermar, aunque también es probable que si lo hubiera hecho, se hubiera visto remitido al punto número cuatro de las condiciones laborales.

Volviendo al tema de los hospitales de Madrid, y tras haber releído concienzudamente los documentos que cuelgan de la página de la SEIMC, respecto a ellos, no puedo evitar tener cierta sensación de “sometimiento con lo que se nos viene encima” porque parece ser “que todo está hecho”.
No obstante quisiera tener fe en que desde la Sociedad se está haciendo TODO lo posible desde YA para revertir esta situación que no es otra que la desaparición de la Microbiología tal y como se entiende en el momento actual.

No cabe duda de que se habrán planteado, como lo hemos hecho algunos compañeros entre corrillos, que con un contrato expresado en los términos anteriormente expuestos, ningún licenciado que haya superado una oposición para enfrentarse a cuatro años de residencia quiera hacer nuestra amada especialidad, salvo que padezca actitudes autolíticas o una necesidad imperiosa por ingresar algún dinero. Tampoco cabe duda que la siguiente deducción es que las demás Comunidades Autónomas copien tan ventajoso modelo para sus Sistemas Sanitarios y no “derrochar” en empleo público, cuando por mucho menos dinero se puede solucionar el “tema del laboratorio”

No es plausible pensar que una persona media, con familia y unos gastos comunes, pueda desarrollar un trabajo en las condiciones que presenta el Hospital de Valdemoro, que se presume como el paradigma de las empresas privadas que regirán el laboratorio de los nuevos hospitales. Vaya desde aquí el más que merecido reconocimiento a todos los compañeros que se ven obligados a trabajar en estas circunstancias, sencillamente indignas.

Obviamente, y ante la falta, más que previsible, de profesionales que quieran dedicarse a una profesión con unas condiciones tan poco atractivas, el ahora nutrido grupo de microbiólogos descenderá dramáticamente y con ello la calidad asistencial a nuestros pacientes, motivo último y más importante de nuestra profesión.

Es sabido que algunos compañeros viendo cierta pasividad por parte de la Sociedad han escogido la opción de darse de baja de la misma. Ciertamente es muy llamativo que desde la SEIMC no haya habido movimientos previos a la publicación de la noticia por parte de la Comunidad de Madrid de prescindir de microbiólogos en los nuevos hospitales, cuando “todos sabíamos” que algo así se “estaba perpetrando”, y haya supuesto una sorpresa para la Sociedad la aparición de la medida.

También llama la atención que en la página se encuentren únicamente las reuniones que se han mantenido con la Consejería y alguna que otra medida tibia sin concreción, y no todas aquellas medidas que se hayan tomado al margen, … a no ser, claro está, que estas medidas no existan.

Aún así y con todo esto, algunos microbiólogos aún nos felicitamos por pertenecer a una Sociedad Científica que con sus virtudes y defectos, nos reúne periódicamente en congresos, que se encarga de mantener documentos científicos al día, que publica una revista con contenidos interesantes, que forma diferentes grupos de estudio….

Espero que en unos meses nos podamos felicitar por seguir perteneciendo a una Sociedad Científica que ha luchado hasta el final por preservar los derechos más esenciales de sus componentes, que son entre otros el derecho a un trabajo digno, ya sea en el ámbito público o privado, que asegure la persistencia de sus especialidades, que las haga atractivas a los nuevos licenciados, y que persevere con todo ello en MANTENER LA CALIDAD DE LA MICROBIOLOGÍA ASISTENCIAL.

Sin un fin así la SEIMC no tiene sentido.

Sin otro particular reciban un cordial saludo.


German Seseña del Olmo

No hay comentarios: